Cómo retirar con seguridad una garrapata de tu gato en siete sencillos pasos

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Si llegas a encontrar uno de estos parásitos en tu gato, necesitarás saber cómo quitárselo de forma rápida y segura. Aquí te decimos cómo.

Si descubres que tu gato tiene una garrapata, quizá tu primera reacción sea buscar unas pinzas para arrancarla de inmediato. ¡Pero no te precipites! La forma segura para retirar una garrapata de un gato requiere un poco de preparación, información y paciencia. Lee esta guía detallada para que puedas hacerlo con seguridad.


Cómo retirar con seguridad una garrapata de tu gato

1. Reúne los utensilios necesarios

Lo primero que debes hacer es reunir algunos artículos que te servirán para que retirar la garrapata sea lo más rápido y cómodo posible para tu gato.

  • Pinza quitagarrapatas: Este utensilio funciona mucho mejor que un par de pinzas normales. Con las pinzas normales es más probable que aplastes la garrapata y dejes parte de su cuerpo unida al gato, junto con una posible infección. Aunque no es lo más recomendable, en caso de que no tengas una pinza quitagarrapatas a la mano, puedes utilizar unas pinzas de punta fina y aguda (no de las que tienen la punta biselada). Si no tienes ninguno de estos utensilios y en la zona en la que vives hay garrapatas de la parálisis (que son muy peligrosas), es importante que lleves a tu gato al médico veterinario para que ahí le quiten la garrapata o que hagas lo mejor que puedas para quitársela con lo que tengas a la mano. ¡Dejar que la garrapata siga alimentándose de tu gato hasta que consigas el utensilio adecuado no es nada recomendable en el caso de este mortífero parásito!
  • Guantes desechables: Las garrapatas pueden transmitir enfermedades, algunas de las cuales también pueden afectarte a ti y a tu familia. Usa guantes para evitar el contacto directo con la garrapata.
  • Toallitas antisépticas
  • Recipiente pequeño con tapa hermética para depositar la garrapata


2. Localiza la garrapata en la piel de tu gato

Aparta el pelaje con cuidado alrededor de la garrapata; procura que tu gato esté lo más tranquilo posible. Si puedes, pide que te ayuden a sostener al gato mientras tú te encargas de la garrapata. Habla con voz suave y relajante y no hagas movimientos bruscos.


3. Usa la pinza quitagarrapatas para retirar con cuidado el parásito

Retirar la garrapata requiere cierta destreza, y es importante que evites dejar por accidente las piezas bucales del parásito en la piel de tu gato. Sigue las instrucciones de la pinza quitagarrapatas y coloca el utensilio debajo del cuerpo del parásito, muy cerca de la piel de tu gato. Jala y gira con cuidado la pinza para retirar toda la garrapata sin apretarla.

Información útil: nunca debes tratar de quemar una garrapata ni de “asfixiarla” aplicándole vaselina, pues estos métodos podrían perjudicar a tu gato.


4. Guarda la garrapata

Coloca la garrapata en el recipiente hermético y guárdala para mostrársela al médico veterinario en caso de que tu gato se sienta mal.


5. Limpia la picadura de la garrapata

Limpia suavemente la zona afectada de la piel de tu gato con un antiséptico diseñado para mascotas.


6. Limpia y recoge

Limpia la pinza quitagarrapatas con un desinfectante y guárdala en un lugar seguro por si necesitas usarla de nuevo. Desecha los guantes y lávate muy bien las manos.


7. Aprende cuándo debes buscar ayuda profesional

Si notas que tu gato está alterado, si todavía tiene parte de la garrapata en su piel o si se siente mal, consulta al médico veterinario. Una sola garrapata de la parálisis puede enfermar de gravedad a un gato e incluso puede ser letal. Si tu gato muestra signos de parálisis por picadura de garrapata, llévalo de inmediato al médico veterinario.


Aplícale un tratamiento preventivo contra las garrapatas

Si tu gato suele salir de casa (en particular si vives en zonas cálidas, donde la prevalencia de garrapatas es alta) es muy recomendable que utilices un producto para controlar garrapatas. Asegúrate de emplear un producto que esté diseñado específicamente para gatos (algunos productos para perros pueden ser sumamente peligrosos para los gatos). El médico veterinario es la mejor fuente de información sobre el producto garrapaticida adecuado para tu gato.

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